Deliciosa, con una textura muy especial y melosa, tipo brownie, nada pesada y de sabor suave. Esta es de esas tartas que lo tienen absolutamente todo. Primero y más importante: ya sólo las palabras galleta + chocolate + castaña tienen la cualidad de hacer que se le haga la boca agua a cualquiera. En segundo lugar, y no menos importante, no puede ser más sencilla de hacer. Y por último, os garantizo que es una tarta que no dejará a nadie indiferente, incluso a aquellos que dicen eso de “no, es que a mí no me gustan las castañas” (como yo, ejem). Además es muy vistosa y aprovechamos uno de los productos de temporada más prolíficos del otoño.
Me parece un postre o merienda perfectos para las Navidades, que ya no están tan lejos…
Tarta de chocolate y castañas
200 gramos de harina
110 gramos de mantequilla fría
50 gramos de azúcar glas
30 gramos de harina de almendras o almendras molidas
1 huevos tamaño M
5 gramos de azúcar avainillado
Un pellizco de sal
350 gramos de crema de castañas
1 tableta de chocolate para repostería de 250 gramos
120 gramos de mantequilla
3 huevos tamaño L
Prepara primero la base de masa sablé, poniendo en un bol grande la harina, la sal, los azúcares y la harina de almendras, y mezclando bien todos los ingredientes con las manos. Incorpora la mantequilla fría cortada en dados y con las manos combina formando una masa de consistencia arenosa. Bate el huevo y agrega la mitad de éste a la masa, y continúa mezclando con las manos. Poco a poco y si fuera necesario, incorpora el resto del huevo batido hasta conseguir una masa homogénea, dándole forma de bola. Pon la masa entre dos papeles de horno y con un rodillo extiéndela, y colócala sobre el molde, ajustándola con los dedos y recortando los bordes sobrantes. Tapa el molde con papel film y deja enfriar en la nevera al menos durante una hora. Pasado ese tiempo, precalienta el horno a 160 grados
. Saca el molde de la nevera, quita el papel film, pon un papel de horno sobre la masa con un puñado de legumbres para hacer peso, y hornea durante 10 minutos. Retira el papel con el peso y hornea durante 15 minutos más; saca el molde del horno y reserva. Baja la temperatura del horno a 150 grados. Lleva el chocolate troceado y la mantequilla al baño maría y mezcla hasta obtener una crema homogénea y lisa. En un bol mezcla a mano con varillas la crema de castañas y los huevos, e incorpora el chocolate, mezclando bien. Rellena la base de masa sablé y hornea durante 50 minutos. Saca el molde del horno, deja enfriar y sirve.
Me hubiera gustado tener tiempo para hacer la crema de castañas de forma casera, pero no pudo ser y utilicé una envasado y lista para usar. Hay diversas marcas, yo escogí La Vieja Fábrica; se encuentran en la zona de las mermeladas, y ya advierto que no son baratas, pero es lo que tiene no tener que andar pelando castañas durante horas. A mí en esta ocasión me compensaba, pero lo suyo es aprovechar este momento...
Me parece un postre o merienda perfectos para las Navidades, que ya no están tan lejos…
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